Se ha hablado tanto de McCartney... Ayer mismo escribí una columna a favor de John Lennon. Pero están los de la "tercera vía beatle"; los distintos, los que preconizan que el verdadero mago de Liverpool era el enjuto George Harrison. Pero nadie, nadie ha tenido alguna palabra para con quien estuvo siempre en la retaguardia del asunto, cuidando las espaldas de los genios: ese señor llamado Richard Starkey.
El chistoso, el más payaso, el más humilde (luego que pasara la súbita fama de la beatlemanía, quería poner una peluquería e invitar a las señoras clientas con un té), quizá el menos músico, pero un baterista de fuste, uno austero y correcto, pero con un timing para los quiebres y una actuación en la azotea de Apple para la historia. Además, puso su voz en canciones propias como 'Don't pass me by' y 'Octopus's garden', y recibió la enorme muestra de gratitud de sus amigos John y Paul para que cantara 'With a little help from my friends', donde aparte confiesa que "intentaría no cantar fuera de tono". Por eso, Ringo estará siempre en nuestros corazones.
Martín Trujillo, El Observador
Hoy estaba, como de costumbre, muy aburrida en el trabajo. Leía el diario con un aire desinteresado y sin prestarle demasiada atención, hasta que en el más remoto rincón de la edición de El Observador del día de hoy, encontré este artículo que me alegró el día.
Viene Paul y salieron los fanáticos de los Beatles de abajo de las piedras. Los amantes de Lennon y McCartney revolotean alegremente, mientras otros se jactan de adorar a George. Pero es cierto, Ringo es aquel al que nadie le ha puesto atención (aunque claro, muy mal no le fue en la vida, eh).
Yo te banco, Ringo. Y todos lo saben. Para mí vos sos el uno, mal.
(Sorry pero algún día tenía que escribir algo medio de fangirl, no?)
Atte.,
Leta
Edit: Claro está que el artículo está acá conmigo, soy una ladrona profesional.
Edit: Claro está que el artículo está acá conmigo, soy una ladrona profesional.